El evento del clúster AMBIT, comisariado por Futurea y apoyado por Gancedo, pone de manifiesto cómo el color, los materiales y los acabados están redefiniendo la narrativa de las marcas en el sector del hábitat.
 
El 19 de septiembre se celebró en Barcelona la cuarta edición del trendFEST, un encuentro impulsado por AMBIT, el clúster de empresas del hábitat, en colaboración con la consultora de tendencias Futurea y la reconocida marca de tejidos Gancedo. El showroom de Gancedo acogió a destacados profesionales de la arquitectura, el diseño de interiores y el sector industrial, quienes compartieron reflexiones sobre el poder del color, los materiales y los acabados (CMF) en el desarrollo de productos y la construcción de marcas.
La psicología del color como motor del diseño
La investigadora de Futurea, Lucía Marín, fue la encargada de abrir la sesión presentando tres paletas cromáticas que dominarán los próximos dos años: Multisensory pastels, Mood-boosting brights y Timeless Colour. A través de ellas, se reflexionó sobre el papel emocional del color en el contexto social actual. “Se comprende perfectamente el momento en el que vivimos y los sentimientos que impulsan a las personas hacia unas paletas de color concretas”. Marín subrayó que “la elección del color no es un tema caprichoso. Condiciona la percepción del producto y la marca en el mercado y debe ser fruto de una reflexión estratégica sobre lo que la marca quiere contar, cómo se comunica el producto con los usuarios y cuál es el posicionamiento de la compañía”.
Creatividad y color desde la raíz
Christoph Brach, cofundador del estudio holandés Raw Color que ha trabajado para numerosas marcas del hábitat, profundizó en el proceso creativo del color como un punto de partida esencial en el diseño. Compartió algunos de los proyectos más representativos de su estudio, donde el color es mucho más que un acabado: “En nuestros proyectos, no hay nunca bocetos en blanco y negro, el color se integra desde el principio, cambiando de alguna forma el orden de hacer las cosas”. Brach destacó que la materialidad y el cromatismo son protagonistas indiscutibles en la narrativa visual de Raw Color, lo que les ha permitido crear propuestas innovadoras y reconocidas en el ámbito internacional.
La tecnología también se viste de color
En el ámbito de la innovación, Claudia Graña, directora de arte de Wallbox, expuso cómo en el desarrollo de cargadores para coches eléctricos, el color y el material están intrínsecamente ligados. “El tono que seleccionamos condiciona el material con el que se tiene que producir cada pieza”, explicó Graña, trazando paralelismos entre el diseño industrial y la arquitectura como fuente de inspiración para el desarrollo de productos tecnológicos. Además, subrayó la importancia de introducir el estudio cromático desde el inicio de cualquier proyecto.
Un final que invita a jugar y degustar las tendencias
El evento cerró con una instalación de Ricard Trenchs, reconocido interiorista, que sorprendió a los asistentes con una propuesta textil inspirada en una de las tendencias presentadas. Su creación, una estructura lúdica que recordaba a un cubo de Rubik, invitaba a la interacción y reflexión sobre el impacto del color en los espacios.
La experiencia multisensorial continuó con una propuesta gastronómica a cargo del equipo de la escuela CETT, que ofreció una degustación única: tejidos comestibles inspirados en las tres paletas de color analizadas durante el trendFEST. Este original cierre no solo fusionó el diseño y la gastronomía, sino que hizo tangible la esencia del evento: el color, los materiales y los acabados no solo moldean productos, sino que crean experiencias completas.
El trendFEST, en su cuarta edición, ha demostrado ser un referente en la conversación sobre el futuro del hábitat y el diseño, consolidándose como una cita necesaria para aquellos que buscan entender cómo las tendencias cromáticas y de materiales definirán los productos de los próximos años.